Las ventajas y desventajas más comunes de los radiadores de aceite

Última actualización: 18.04.24

 

Para que puedas tener la temperatura ideal en tu hogar durante las noches frías y temporadas invernales, quizás un radiador de aceite pueda ser una buena opción, pero antes de cualquier compra, te recomendamos evaluar las ventajas y desventajas que te mencionaremos en esta guía para que puedas adquirir el que, posiblemente, sea el mejor radiador de aceite.

 

¿Qué es un radiador de aceite?

Los radiadores de aceites son unos productos emisores térmicos que funcionan a partir del calentamiento del aceite que llevan en su interior y, este se propaga por toda su estructura de forma interna, calentándolo para después poderlo expulsar equitativamente en el área en el que esté instalado.

 

Los radiadores de aceite y los problemas por una mala gestión

Para que los radiadores de aceite puedan funcionar correctamente, necesitan estar conectados de forma individual a una fuente de alimentación. Es decir, tienen que estar enchufados a un sistema eléctrico para que puedan emitir calor correctamente, ya que, si estos equipos se conectan simultáneamente con otros productos que consuman energía o mediante un cable extensor, podría haber una falla eléctrica que podría ocasionar problemas en tu hogar. Dado que, según los datos suministrados por la fundación MAPFRE durante el año 2015, el 20,3% de la población española se vio afectada gravemente por incendios ocasionados por equipos generadores de calor y un 11,2% por una mala gestión de equipos electrónicos.

 

Ventajas de un calentador de aceite:

 

Ventajas principales:

1. Podrás disfrutar de climas confortables durante las temporadas invernales y noches frías.

2. Estos productos son capaces de almacenar suficiente calor aún después de haberlos apagados o desconectado, donde el tiempo podrá variar desde los 45 minutos hasta 4 horas después de haber completado su ciclo.

3. No son ruidosos. Es decir, no emitirán ningún tipo de sonido que pueda molestar durante su funcionamiento.

4. Algunos modelos incluyen un termostato o un control manual que te permitirá ajustar la temperatura a la que más desees; siendo una característica útil cuando esté presente un tiempo climático leve.

 

 

5. Podrás moverlos a cualquier parte. Dado que, la mayoría de los modelos actuales en el mercado poseen asas y ruedas, lo que facilitará su transporte hacia cualquier parte de tu hogar.

6. No necesitan que le realices un mantenimiento a profundidad, por lo que te será mucho más económico en comparación a otros radiadores, ya que, solamente deberás desconectarlos y pasarle un paño mojado para eliminar el polvo y la suciedad.

7. Son accesibles. Es decir, si haces una pequeña comparativa con otros sistemas emisores de calor y sistemas de calefacción portátiles, el precio es relativamente mucho más bajo, por lo que podrás adquirir un producto útil, de buena calidad y ahorrar algunos cuantos euros.

8. Estos productos no son tóxicos y no emiten residuos en el ambiente, ya que, debido a que solamente necesitan de electricidad y aceite, este se calentará, pero no se quemará, por lo que no necesitarás reponerlo durante un largo período.

9. Algunos modelos incorporan un sistema de seguridad que ayudará a mantener seguro el equipo y tu hogar por el sobrecalentamiento o las altas de tensión. Además, este factor dependerá del fabricante, ya que, no todos los modelos lo tienen.

10. Cuentan con una potencia intermedia que calentarán áreas pequeñas con mucha facilidad; siendo productos prácticos para ubicarlos en habitaciones y salas de estar de pocas dimensiones.

 

Desventajas principales:

1.No se recomienda que se utilice como único sistema de calefacción para hogares amplios, ya que, puede salir afectar tu factura de servicios si decides calentar cada una de las áreas.

2. Mayor consumo, ya que, dependiendo de la potencia del modelo seleccionado, el consumo energético y el tiempo que tardará en calentar no será inmediato, por lo que te recomendamos que tengas en cuenta la inercia térmica de cada producto.

3. Su estructura se calienta en exceso, lo que puede ocasionar que las personas que tengan contacto con él puedan sufrir quemaduras, por lo que se recomienda utilizarlo sin que los niños estén presentes.

 

 

¿Qué características hay que tener en cuenta para adquirir un calentador de aceite de un buen estándar de calidad?

Primero, te aconsejamos que tengas en cuenta la potencia del modelo que vayas a seleccionar, ya que, dependiendo de este factor, el calor que proporcionará podrá ser poco o suficiente.

Además, las áreas que posean unas dimensiones de 10 a 20 metros se podrán calentar con facilidad con calentadores de aceite que tengan una potencia de 400W a 500W. Por lo tanto, si el espacio en el que pretendes disminuir el frío es un poco mayor, te aconsejamos que elijas uno de más potencia, pero eso también implica que eleves el monto total a invertir.

Segundo, las opciones de seguridad del producto es una característica importante que no deberás dejar pasar por alto. 

Los calentadores de aceite que posean un sistema antivuelco se apagan de forma automática cuando este se cae o lo mueven desde un lugar a otro, lo que ayudará a evitar incendios y altas de tensión que podrían afectar tus otros equipos eléctricos y tu hogar.

Aunado a ello, también hay otros productos que cuentan con un sistema de protección contra sobrecalentamiento, lo que evitará que el producto pueda pasar sus niveles térmicos permitidos, por lo que este se apagará y protegerá el equipo para que su tiempo de vida no se vea afectado. Asimismo, también ayudará a evitar dos de los accidentes más comunes en España que son ocasionados por los aparatos eléctricos y los dispositivos generadores de calor.

Tercero, considera adquirir un calentador de aceite que posea asas ergonómicas y ruedas. Dado que, esto te permitirá moverlo de un lugar a otro para que le agregues el calor necesario a esas áreas en la que vayas a estar.

Cuarto, para que puedas prolongar el tiempo de vida útil de tu calentador, te recomendamos que evites colocar ropa húmeda o mojada sobre su estructura. Dado que, aunque esto pueda sacarte de apuros al momento de utilizar una prenda que no se ha secado por completo, la mayoría de estos equipos no cuentan con protección IP-65 o mayor, por lo que no estarán protegidos contra agua o humedad y sus niveles de oxidación y corrosión podrían elevarse al colocar las prendas mojadas.

 

DEJA UN COMENTARIO

0 COMENTARIOS